Resumen
Una pelicula de animación diferente sobre la vida y la imaginación
Autor: Santiago Gómez Chacón
Hace poco se revelaron las nominaciones a los Oscars y la categoría de mejor largometraje animado es una de las más disputadas. Todas resultan ser brillantes, desde la conmovedora «The Wild Robot» hasta la enternecedora «Flow», pasando por la apasionante «Inside Out 2» o la divertidísima «Wallace y Gromit:La venganza» se sirve con plumas. La última de las cinco películas en estrenarse en nuestro país ha sido «Memorias de un caracol», un relato adulto y reflexivo sobre la vida y cómo afrontarla aún con todas sus complicaciones. Sin duda, otra gran favorita para recoger la ansiada estatuilla.
LA TRAMA
“Memorias de un caracol” nos relata la biografía de Grace en la que ella misma se colocará en la posición de narradora haciendo repaso de todas sus vivencias. Tras la muerte de su mejor (y única) amiga Pinky, Grace se encuentra muy sola y decide relatarle a su caracol Sylvia cómo ha llegado hasta esa situación. Desde la visión de una Grace adulta, ella nos compartirá un detallado viaje introspectivo desde su nacimiento hasta ahora a modo de terapia consigo misma.
La vida de Grace parece ser un infinito drama sin descanso, una concatenación de desgracias una tras otra. La protagonista abrirá su corazón de par en par haciéndonos testigos directos de todos los traumas que ha atravesado. Para atenuar de alguna manera todo ese dolor, Grace nos regalará pequeñas píldoras de humor que, lejos de evadirnos, no harán sino hacernos más cercanos de su tragedia. No es raro preguntarse si tras tal cantidad de desdichas se puede seguir adelante, ella misma también se lo cuestionará tratando rescatar de alguna manera la esperanza y el lado positivo a vivir la vida.
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DIRECCIÓN Y ESTILO VISUAL
La película posee el sello de autor del aclamado cineasta Adam Elliot, anteriormente oscarizado por su cortometraje titulado “Harvie Krumpet” en 2004. Adam Elliot es un realizador australiano de cine de animación independiente muy conocido en el campo del stop-motion. El largometraje que lo hizo conocido internacionalmente fue la emotiva “Mary and Max”, un bellísimo relato de amistad que lanzaba un canto a la vida desde la perspectiva de dos genuinas almas solitarias y apenadas. Manteniendo esa misma estética de colores apagados y escenarios irregulares, “Memorias de un caracol” pretende ser una nueva historia intimista que conecte con el dolor al mismo tiempo que sea ejemplo de superación ante las injustas adversidades que nos impone la vida.
La gama cromática predominantemente sepia, junto con sus formas flácidas e imperfectas, nos hablan del oscuro mundo al que Grace se debe someter en el transcurso de su existencia. La cinta destaca por su sensibilidad a la hora de abordar temas tan difíciles de tratar como la muerte, la soledad, el abuso o la depresión. Además, el autor se destaca por subrayar lo verdaderamente desagradable de este mundo y relativizar aquello que no lo es tanto, reivindicando lo raro y restando peso a aquello que pueden ser errores y malos tragos circunstanciales de la vida. Todo ello acompañado incluso de un característico humor negro que desde el prisma de la comicidad no sólo consigue intensificar la llegada de aquellos momentos más desoladores sino que nos hacen empatizar aún más con esas anécdotas cargadas de tristeza y desesperación.
PERSONAJES
De nuevo, Adam Elliot, se decide por darle voz a un personaje principal introvertido e incomprendido al que el mundo ha desplazado injustamente a los márgenes de la sociedad. Como en “Mary and Max”, el protagonismo se lo lleva alguien que, sin conocerlo, podríamos encasillarlo de mala manera de raro y punto. El autor nos pretende derribar por completo los prejuicios ante este tipo de personas extravagantes, sentarnos con ellas y escuchar su historia de principio a fin para poder comprenderlas en vez de rechazarlos y despreciarlos como “bicho raros”. Y es que detrás de personas como Grace, que cubre su cabeza con un gorro de antenas de caracol, nos pueden enseñar incluso más de la vida con lecciones vitales y de superación como jamás haría un tipo “corriente”.
TEMÁTICA Y SUBTEXTO
Como bien mencionamos antes, “Memorias de un caracol” se atreve a tratar muchos de esos temas complejos y difíciles de abordar que han terminado siendo sepultados como asuntos “tabú” entre la sociedad. Se adentra en cuestiones como el cómo conciliar con la muerte, aprender a ser fuerte frente al acoso o el rechazo, saber pedir ayuda y tomar ánimos durante una depresión o valorarse a uno mismo con sus rarezas y diferencias. Pero sobre todo, al igual que “Mary and Max”, Adam Elliot profundiza en todo lo que puede acarrear la temida soledad. Estar aislado y sentirse solo es el mayor de los problemas de nuestra protagonista y fruto de esto mismo derivan gran parte de sus conflictos vitales. La salud mental es la que se ve gravemente afectada por culpa de ese aislamiento social que puede acabar por fagocitar por completo el ánimo de uno mismo.
Para terminar, el mensaje final que nos pretende transmitir la obra hay que recalcar que no es de conformismo y sumisión ante el drama constante lleno de infortunios que puede comprender nuestra vida. Al contrario, es de entender de dónde venimos para comprender y dejar de martirizarse por nuestro pasado. El pasado se convierte aquí en una herramienta para saber cómo queremos afrontar el presente transformándose así en una gran lección de aprendizaje y evolución, el paso para salir de su cárcel de soledad y poder disfrutar afuera del caparazón de caracol que se había construido.
CONCLUSIÓN
“Memorias de un caracol” es una nueva obra maestra de Adam Elliot, una de las imprescindibles dentro del cine de animación. El largometraje ahondará en el dolor más íntimo de la vida de nuestra pobre protagonista, no para recrearse en sus desgracias sino para realizar una potente carta en homenaje a la vida como ejemplo de superación. Sin duda, un intenso dardo al corazón que termina por dejarte, al igual que a mí, en un bonito mar de lágrimas con el que sonreirás a la vez que lloras.
Lo mejor: Cómo te hace reflexionar sobre la vida mientras te sostiene con el corazón en un puño. Terapia de choque, lloras de tristeza pero también emoción.
Lo peor: Lo dura y triste que resulta en muchos momentos puede terminar por romperte antes de acabarla.
Nota: 10
A continuación os dejamos la critica de la pelicula que llega a los cines este viernes